No conviene pasar el día de los enamorados con frío en casa, ¿verdad? Menos mal que tenemos los radiadores de aluminio… ¿Te has preguntado alguna vez por qué son como son? El aluminio es un material que goza de una enorme capacidad para llevar a cabo la transmisión térmica. Dicha ventaja facilita que el calor se distribuya por toda la casa. Esto, junto a los diseños en aletas a los que estás acostumbrado, permite una poderosa emisión térmica. Pero, ¿cómo funcionan los radiadores de aluminio exactamente y por qué son una opción tan popular de calefacción?
Funcionamiento de los radiadores de aluminio
El funcionamiento de los radiadores de aluminio es simple. A través de su estructura interna hay agua caliente que circula proveniente del generador de calor, que puede ser una caldera, una bomba de calor u otro sistema. De este modo, el radiador intercambia la energía que viene del agua caliente con el ambiente de tu casa. Como consecuencia, se incrementa la temperatura, logrando que no pases frío.
La potencia calorífica
El calor total que pueden llegar a emitir los radiadores de aluminio varían en función de varias cosas. En primer lugar, todo depende de la superficie de intercambio y la distancia térmica entre la superficie del radiador y la del ambiente en el cual haya sido instalado. Por consiguiente, a mayor superficie de intercambio y mayor diferencia de temperatura, la cantidad de calor emitido será superior. Para calcular esto, los fabricantes añaden un dato que siempre puedes consultar: la potencia calorífica para un salto térmico concreto. El salto térmico, por su parte, es la distancia que media entre la temperatura media del radiador y la temperatura ambiente.
Ventajas y desventajas de los radiadores de aluminio
Loa radiadores de aluminio cuentan con muchas más ventajas que desventajas sobre sus competidores. Por un lado, tienen poca inercia térmica, por lo que logran alcanzar la temperatura deseada en poco tiempo. Además, son más baratos que los radiadores de fundición y más fáciles de instalar. Como desventajas, se podría citar que se enfrían rápidamente y que su resistencia es menor a la de los radiadores de fundición.
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